Por: Juan Carlos Mortati
Temprano había estado mirando algunos
expedientes que iban a ser tratados en la sesión de esa noche en el Concejo
Deliberante. Una cercanía estratégica con el Bloque justicialista es
precisamente una de las tareas que el
Intendente me ha encomendado y quiere
que desarrolle a pleno. Un rato después bajé a privada por una consulta y
averiguar detalles de la llegada del Ministro de Agricultura de la Provincia.
Juan, querés acompañarlo a Julio a Tandil,- me
ofreció Mario Suárez, cuando entré a saludarlo a su oficina.. Salen en una
combi en media hora, porque vienen varios con el ministro..-Si por supuesto, le
contesté.
No podía desperdiciar
semejante regalito. Una semana intensa con el tema de la reforma tributaria
provincial, precisamente, por el revalúo
de inmobiliario rural y tener la posibilidad de charlar una hora ,
directamente, con el ministro Arrieta, era “toda una oportunidad”.
La
frambuesa y el inmobiliario
El avión de la
gobernación llegó con demora. Unos 40 minutos. Pero sirvió para despuntar una
interesante charlita con el operador Mario Veloz , en la
Base Aérea de Tandil. Nos contó que desde
ahí cubrían regionalmente el área de distribución aérea, y nos comentó la
importancia de revitalizar el transporte comercial y turístico con los vuelos
de cabotaje de la Base,
atendiendo a las posibilidades y requerimientos de la zona. Desde ahí veíamos
dos Mirages alistados para cumplir con el ritual de las horas de vuelo exigidas
a los pilotos de la Fuerza Aérea.
Once y media arribó la comitiva oficial. Andrés, el hijo de
Julio, listo con la filmadora, recogió todo los detalles. A la combi y a
Juárez. Comentarios de circunstancias, elogios al paisaje serrano del
recorrido, y Julio que lo abordó contándole los proyectos turísticos para
Barker. Le entregó una carpeta donde no
faltaba nada, informes, antecedentes, historia, proyectos, fotografías y por
supuesto, algunos pedidos.
“Allá queda Barker”, señaló Julio, detrás de esas sierras,
queda Barker”. El inconfundible “Sombrerito” se había sacudido la niebla de la
mañana húmeda y se exhibía espléndido,
con su señorío entre las primeras sierras barkenses. Ahí nomás le sacó
la promesa a Arrieta de estar presente en la próxima fiesta de “La frambuesa”.
Cuando vi la
oportunidad, le pregunté,- y, sale la reforma del inmobiliario rural? Con tranquilidad, dijo que confiaba en la
próxima semana se aprobaría, que se lograría el quórum necesario, las
negociaciones seguían, que se iba a
llegar a un acuerdo.
Reconoció que las circunstancias y la presión que existió
sobre el tema no permitió que se pudiera
explicar claramente el alcance de la reforma.
ORDENANDO LA
CHARLA
Voy a tratar
de recopilar y ordenar todos los contenidos de esa
interesante charla que tuvo la informalidad propia del ajetreo del viaje.
“Hace casi 20 años
que no se hace un una verdadera formulación de la valuación de la tierra, diría
que la última que se hizo a fondo fue en el “54, con Perón”, expreso Arrieta..
Esta frase tomada del amplio contexto de la charla , nos va a servir de
introducción del tema.
“Quien hizo un buen
trabajo sobre esto fue Agustín Lodola, que está en la dirección de Política
tributaria. Que trató de revertir las grandes distorsiones que tienen el
impuesto inmobiliario. Lo que se busca es poner un plano de justicia en el
tema”.
En otro tramo de la charla Arrieta explicó que, “este
atraso, esta falta de actualización, eliminó el aspecto de la progresividad del
tributo- Por ejemplo, más allá de lo que es el valor fiscal, el impuesto que
paga un campo importante en zonas como Rojas, que creo que es el de mayor
valuación actual, paga el mismo impuesto que un campo de similar cantidad de
hectáreas, de la zona de Dolores, donde está la depresión del río Salado”.
“Lo mismo pasa, según ese estudio de investigación , con
Necochea, donde pagan el mismo impuesto
por hectárea, que el caso de campos de 9 de Julio, donde la valuación es
casi un 50 % más alta”.
-Que lástima, le
dije, que muchos de estos argumentos , no se mostraron bien. “El tema tiene,
sus aspectos, comentó Arrieta, aquí están en juegos aspectos de rentabilidad,
de la distribución equitativa de la riqueza, del sentido social de la tierra.
Es lo que se está llamando, el nuevo paradigma. Hay todo un gran concepto que
es la “ruralidad”.Comprende, el valor de la tierra, su productividad, su
inserción social, la incorporación de tecnología, los salarios del peón rural.
Todo juega en esta nueva valoración integral. Más aún, hay que trabajar sobre
el producto regional, el valor agregado en origen, la manufactura del producto
primario. Todo apunta a la mayor productividad, rentabilidad y más trabajo para
todos”.
En la Escuela Agropecuaria.En
el Instituto Zivecchi. En el Municipio
En la disertación
en la Escuela Agropecuaria
salieron a la luz muchas de estas ideas, como la nueva ruralidad, y promover
las manufacturas, rescatar el valor en origen, revalorizar la industrialización
del producto primario. Guauuuu!!!
Cuando visitó el
Instituto Zivecchi, el Ministro quedó asombrado de las posibilidades que se
abren en ese lugar a la Escuela Agropecuaria,
donde se instalará su futura sede. Arrieta, comentó una experiencia similar en
su zona, Cañuelas, donde él fue intendente y donde cuentan con una Escuela agropecuaria con
una gama y diversificación de tareas que, según él, en Zivecchi se van a poder
desarrollar estupendamente. “Aquí van a poder conocer toda la temática de la granja y la diversidad
de la explotación agropecuaria, no sólo estudiarla, sino hacer prácticas”, le
escuché decir al ministro en su recorrida por el establecimiento de la Colonia Zivechi. Casi
susurrando, dijo “este Zivecchi, no era
ningún tonto, la tenía clara.!”. Fue un pionero, le dije. Vinieron de Italia con los Guglielmetti, piamonteses, que instalaron un Molino
Harinero.
En la charla en el
despacho municipal volvimos a la reforma
del inmobiliario y explicó un poco más el trabajo realizado. “Se tomó un
valor promedio óptimo de hectárea, analizando todas las zonas de la Provincia. La cifra que
resultó, rondaba los $ 19.000,- Este
valor se multiplicó por un coeficiente que incorporaba, valor fiscal,
productividad, rentabilidad, en base a la calidad de la tierra, distinto por
supuesto para cada zona. La cifra resultante, la nueva valuación inmobiliaria,
se dividió por la mitad, para
amortiguar el impacto impositivo”.
“El valor resultante significa la nueva valuación de la
tierra. Sobre esa cifra se aplica la alícuota, que su vez se redujo de 4 a 1”.
Para clarificar el
tema, nos acercó un informe concreto
sobre el impacto del nuevo impuesto sobre los productores de Benito Juárez.
“Tengan en cuenta, dijo que aquí las tierras también son dispares, algunas
mejor que otras, de acuerdo a la zona”.
El informe es el siguiente, en Benito Juárez, el 47,13 % de
las partidas bajan, pagarán menos impuesto inmobiliario rural. El 8,58 % se
mantiene igual .El 18,37 % de las
partidas experimentará un aumento de $ 10, por ha. por año.
El 11,90 % de las partidas pagarán entre $ 10 y $ 25 Más por
ha. Por año. El 6,40 % de las partidas entre $ 25 y $ 40 más por ha. , por Año.
El 3, 66 % de las partidas entre $ 40 Y $ 60 más por ha. por año. El restante
3, 96 % aumentará $ 60 por ha. Por año.
La base imponible promedio para nuestro partido resultante ,
sobre la cual se aplicará la alícuota impositiva será de $ 4.694 la ha. Es
decir sobre este valor se calcularán los impuestos provinciales o nacionales.
EL NUDO DEL PROBLEMA
Durante la
conversación llegamos a uno de los nudos “gordianos” de esta reforma tributaria
provincial, que consiste en que la nueva valuación incrementa los patrimonios
individuales y caen bajo el alcance de
otros impuestos.
El Ministro Arrieta
explicó de igual manera que el propietario de un camión de transporte moderno
debe pagar por su patrimonio, que es un capital de trabajo también sujeto a las
variantes de rentabilidad y riesgo de inversión, el propietario de un
establecimiento rural debe tener las mismas reglas tributarias. Y si bien
muchos de esos tributos son de orden nacional, hay que tener en cuenta que son
aportes que el Gobierno Nacional los destina, por ejemplo al mantenimiento de
universidades, hospitales, escuelas, construcción de rutas, entre otras
inversiones a lo largo de todo el territorio.
La temática sigue en
pie, las negociaciones y posibles acuerdos también. Todos
anelamos que esta coyuntura, que directa o indirectamente, nos involucra a
todos encuentre un cause equitativo de solución.