Por: José Silva
No hay un solo hombre
que no se revuelque
en su propia mentira,
que rasgue sus vestiduras,
queriendo mostrar su integridad.
El hombre es la mentira,
la misma que atenta contra la verdad.
Es el reto de no poder llegar a ver.
¿Qué tan débil puede ser el otro,
cuando siquiera piensa si es la inteligencia,
la que lo lleva a vencerla?
No hay comentarios:
Publicar un comentario